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UN TÚNEL FERROVIARIO DE 14 KILÓMETROS FUE INAUGURADO A TRAVÉS DEL ESTRECHO DEL BÓSFORO

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Turquía construyó el primer túnel subacuático que une los lados asiático y europeo de la ciudad de Estambul y permitirá enlazar las dos redes ferroviarias turcas.

El presidente de Turquía, Abdulá Gul y
el primer Ministro Erdogan en el
momento de la inauguración.
El Gobierno turco financió el proyecto con el apoyo del Banco de Japón. Se trata de la primera conexión ferroviaria entre Europa y Asia. Tiene 14 kilómetros y transportará a 1,5 millones de pasajeros al día.

Europa y Asia se unieron hoy por un túnel ferroviario a través del Bósforo turco. Lleva el nombre de Marmaray y es un túnel doble que ha tardado nueve años en construirse, pero su diseño se remonta a hace un siglo y medio.

El túnel une los lados europeos y
asiáticos de la ciudad de Estambul.
La línea se extiende sobre casi 14 kilómetros, con un tramo submarino de 1,4 kilómetros. Las obras han costado más de 3.300 millones de euros. El túnel está preparado para resistir terremotos de 9º en la Escala de Richter.

El Gobierno turco ha podido financiar el proyecto gracias al apoyo del Banco de Japón, mientras que el grupo español OHL está a la cabeza de un consorcio encargado de las líneas férreas.

El trayecto del Marmaray es de 14 kilómetros.
Click en la imagen para ampliarla.
Precisamente, el primer ministro japonés Shinzo Abe estuvo presente en la inauguración junto a su homólogo turco, Recep Tayyip Erdogan, gran promotor de la infraestructura tras haber sido alcalde de Estambul (pese a las protestas de unos proyectos que se consideran faraónicos). Además, todavía no estarán terminadas todas las conexiones con el resto de la red del metro de la capital económica (y ciudad más poblada del país).

El tren Marmaray transportará 1,5 millones
de pasajeros por día.
Por otro lado, los importantes hallazgos arqueológicos también han retrasado los trabajos. Del subsuelo se han extraído una treintena de navíos bizantinos, en lo que representa la mayor flotilla medieval jamás descubierta. Además, se hallaron 40 mil objetos antiguos.

El primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, declaró que “es la realización de un sueño de 150 años y conecta la historia con el día de hoy”, añadió Erdogan, en referencia al primer plan para construir un túnel en el Bósforo, que data de 1860, cuando lo propuso el sultán otomano Abdulmedjid I.

Uno de los barcos encontrados durante
la excavación de la estación Yenikapi.
“No solo conecta continentes sino también personas y países. El Marmaray no es solo un proyecto para Estambul sino para la humanidad”, continuó el primer ministro.

Erdogan destacó que en 4 minutos se podrá cruzar el estrecho por el túnel, cuando anteriormente en barco se tardaba 15 minutos.

La inauguración tuvo lugar, además, en el Día de la República Turca y en el 90º aniversario de su fundación. Al acto acudieron los jefes de Gobierno de Rumanía y de Japón, una de cuyas empresas ha sido corresponsable del proyecto junto con una compañía turca. También estuvieron presentes el presidente de Somalia y ministros de Transporte de varios países. Todos viajaron desde la estación Üsküdar en el lado asiático hasta la estación Yenikapi en el lado europeo.

Así explicaban las publicaciones turcas
este túnel que costó 3.300 millones
de dólares.
Este túnel es el primero de una serie de megaproyectos planeados por el Gobierno de Erdogan para Estambul, la mayor ciudad del país y su centro económico, comercial y turístico. También se están construyendo un tercer puente sobre el Bósforo y un segundo túnel, para el tráfico de vehículos, ambos previstos para 2015. Además, ya han empezado las obras del que será el aeropuerto con mayor capacidad del mundo y el tercero de Estambul que conllevará la tala de 657.000 árboles, según el propio Ministerio de Medio Ambiente.

Sobrepasando a los anteriores en magnitud, el Gobierno también quiere construir un canal artificial en el lado europeo de Estambul, que conectaría el mar Negro con el mar de Mármara para aliviar el tráfico naval en el Bósforo y que se inauguraría en 2023, cuando se conmemore el centenario de la fundación de la actual República Turca.


El Marmaray puede resistir sismos de
hasta 9º en la escala de Richter.
Ayer se hizo el viaje inaugural en tren a cargo de las más altas autoridades, entre las que se encontraba el presidente turco Abdulá Gul. Hoy era la inauguración para el público pero a las 8 de la mañana, en el primer viaje se cortó la electricidad. Los andenes, abarrotados, se quedaron a oscuras y el tren inmovilizado.

Este primer incidente ha dado pie a que un grupo de pasajeros decidiese iniciar una expedición y auto proclamarse los primeros en cruzar caminando dos continentes bajo un túnel. Riza Behçet Akcan, ingeniero jefe durante ocho años los sistemas de señalización y comunicación del Marmaray, pone el grito en el cielo ante lo ocurrido: "De haber vuelto la electricidad mientras caminaban por el túnel, podrían haber muerto".


Infografía del túnel Marmaray.
Click en la imagen para ver los gráficos.
La empresa española OHL, en consorcio con la turca Dimetronic, se ha encargado de la electrificación del Marmaray. Uno de los ingenieros que han participado en las obras, Martín R. Maidana, ha asegurado que no se puede arrancar un tren enchufándose a la red de la ciudad. "Es imposible conectar una central transformadora de alta tensión a una red urbana".

Maidana cuenta que el apagón de primera hora de la mañana, que ha durado diez minutos, tuvo lugar después de que la subestación eléctrica del Marmaray recibiera una orden de detención del suministro emitida desde el centro de control. "Todavía se está investigando quién ha dado esa orden", aclara.


Aún faltan construir las conexiones del
túnel al resto de la red ferroviaria turca.
A fin de evitar el caos en las primeras horas de funcionamiento del Marmaray, las autoridades han solicitado a los viajeros que eviten dedicar el día a ir y venir cruzando el Bósforo bajo el mar sin bajarse del tren. Y por si acaso vuelve a haber otro incidente, los empleados del servicio han prohibido a medio día el acceso de la prensa a las flamantes instalaciones.

El primer ministro Recep Tayyip Erdogan anunció que el billete del Marmaray sería gratuito durante los primeros quince días, lo que provocó una abrumadora afluencia de pasajeros.


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