Quantcast
Channel: HUMANIDAD Y COSMOS
Viewing all articles
Browse latest Browse all 1457

PARACAIDISTAS ALEMANES FRENAN EL AVANCE BRITÁNICO EN DJEBEL ABIOD

$
0
0
En este poblado de Túnez, se produce el primer enfrentamiento de alemanes e ingleses desembarcados en la Operación Torch, el 17 de noviembre de 1942. La resistencia de los alemanes obligará el 1° de diciembre al general inglés Kenneth Anderson a replegarse con más de mil bajas británicas y la pérdida de 70 tanques.

Los Fallschirmjagers o paracaidistas alemanes
eran una fuerza de élite en la Segunda
Guerra Mundial.
Las unidades de Fallschirmjäger o de paracaidistas alemanes de la Luftwaffe estaban generalmente muy bien equipadas; tenían las armas más selectas de la Wehrmacht, como el fusil de asalto FG 42, que fue utilizado exclusivamente por ellos. Por la valentía de los paracaidistas la columna británica en Djebel Abiod vio detenido su avance durante 9 días.

De acuerdo con la práctica alemana estándar, estos grupos de combate se denominaban según el nombre de su comandante, como el Grupo Erdmann en Francia o la Brigada de Paracaidistas Ramcke en el norte de África. Estos últimos se habían estado preparando para la Operación Hércules (Unternehmen Herkules), el ataque para la invasión de Malta, que en noviembre fue cancelada.

El 8 de noviembre de 1942, con la Operación Torch, cuyo comandante en jefe era el general Dwight Eisenhower, son desembarcadas numerosas tropas aliadas al oeste de Túnez: en Argelia (Oran y Argel) y en Marruecos (Casablanca).

El Tnte. Cnel. Kenneth Arthur
Anderson envió una avanzada
desde Argelia hacia Túnez
que fue detenida 9 días por
los paracaidistas alemanes.
Para el 10 de noviembre había cesado la oposición francesa a los desembarcos de la Operación Torch, creando un vacío militar en Túnez. Inicialmente el plan del Estado Mayor aliado había obviado una fuerza de desembarco para Tunicia por la falta de fuerzas suficientes para destinarlas a ello. Como resultado, el británico Teniente General Kenneth Anderson (1891-1959) debía enviar rápidamente una fuerza operativa desde Argelia antes de que las fuerzas del Eje pudieran establecer una fuerza defensiva en Túnez.

Debido a que la Unternehmen Herkules, el nombre en clave alemán dado a una planificación que nunca se ejecutó, la invasión italo-alemana de Malta u Operación Hércules, que consistiría en un ataque combinado por aire y mar, se esperaba eliminar la base aérea y naval británica de Malta y asegurar un flujo ininterrumpido de suministros a través del Mar Mediterráneo a las fuerzas del Eje en Libia y Egipto. A pesar de los intensos preparativos que se hicieron tanto por las fuerzas militares alemanas e italianas, la situación de la guerra que cambió rápidamente en el norte de África dio lugar a la cancelación del plan en noviembre de 1942.

Los alemanes detectaron en noviembrenumerosos barcos aliados desplazándose a través del estrecho de Gibraltar hacia el norte de África. Se reconoce entonces una nueva amenaza en el Mediterráneo, y aunque en un principio se pensó que los aliados planeaban invadir Córcega o el sur de Francia, pronto se hizo evidente que Túnez era su objetivo. Quien mantuviera Túnez bloqueaba el acceso a Libia. Sin Libia privarían a los aliados de bases, a una distancia cómoda para poder atacar Italia.

Los paracaidistas alemanes
desfilando en Túnez,
noviembre de 1942.
Tras la cancelación del ataque a Malta, el día 9 de noviembre de 1942 el comandante general de los paracaidistas, el generalKurt Student, ordenó al FJR.5 (FallschirmJäger Regiment 5) y al recientemente creado XI Fallschirmpionier Bataillon del Mayor Rudolf Witzig, asegurar los aeródromos de La Marsa y El Aouina en Túnez.

Las autoridades francesas de Vichy estaban dudosas en cuanto a quién apoyar, y mientras tanto mantuvieron abierto el acceso a sus aeródromos tanto para el Eje como para los aliados. No obstante desde el 9 de noviembre había informes aliados que hablaban de la llegada a los aeródromos de Túnez de 30 aviones alemanes, y para el día siguiente los reconocimientos aliados ya arrojaron una cifra de unos 100 aviones. Dos días después las fuerzas del Eje pusieron en marcha un puente aéreo que traería más de 15.000 hombres y 581 toneladas de equipo, junto a los buques de transporte que aportaron también 176 tanques, 131 piezas de artillería, 1.152 vehículos y otras 13.000 toneladas de equipo. A finales de mes los alemanes habían desembarcado 3 divisiones, incluyendo la 10ª División Panzer, mientras que los italianos habían desembarcado dos divisiones de infantería. El 12 de noviembre el alemán Walther Nehring fue nombrado comandante del recientemente formado LXXXX Cuerpo de Ejército, encargado del conglomerado de fuerzas alemanas en Túnez. Sin embargo el comandante francés de Tunicia, el General Barré, desconfiaba de las intenciones italianas y por esta razón decidió retirarse con sus tropas hacia el interior, a las montañas, y estableció allí una línea defensiva con las órdenes que se disparase a cualquiera que intentase cruzarla.

Poster de la Segunda Guerra
Mundial glorificando a los
comandos Fallschirmjager
de paracaidistas alemanes.
A primeras horas del día 11 de noviembre, los paracaidistas alemanes embarcaron abordo de aviones de transporte Junkers Ju 52 (Spitzname: Tante Ju), y volaron hacia Túnez donde aterrizaron en el aeródromo de El Aouina. Recibiendo ordenes de dirigirse a Túnez (ciudad) a través de la carretera que conduce a la ciudad desde el Oeste. También protegieron el aeródromo de La Marsa que era de vital importancia para el resto de aterrizajes de las fuerzas alemanas. Pocos días después, el 12 de noviembre de 1942, más fallschirmjägers llegaron. Una fuerza con capacidad de combate comenzó ya a formarse en Túnez.

El 11 de noviembre la 36ª Brigada de Infantería británica había desembarcado en Bujía sin encontrar ninguna oposición, pero las dificultades logísticas le impidieron alcanzar la carretera a Túnez hasta el día 13. El Aeródromo de Bona fue ocupado al asalto por el 3.er Batallón de Paracaidistas ingleses, a lo que siguió la toma del puerto el día 12 por varios grupos de Comandos.

La resistencia alemana en Djebel Abiod
El avance de la 36ª Brigada británica le lleva a alcanzar Tabarka el 15 de noviembre y Djebel Abiod el día 17, donde tuvieron el primer enfrentamiento con las fuerzas del Eje, a cien kilómetros de la capital tunecina.

El mayor Rudolf Witzig y sus
paracaidistas combatieron
como leones en  Djebel
Abiod contra un enemigo
superior en número.
En tanto, la 1.Kompanie (1./FJR5) y la 2.Kompanie (2./FJR5) se dirigieron hacia Tabarka, moviéndose a través de Mateur. La 3.Kompanie (3./FJR5) del Oberleutnant Friedrich se quedaría en Bizerta como reserva. A su llegada a Mateur fueron recibidos con gran entusiasmo por los árabes de allí. El Fallschirm Pionier Bataillon del Mayor Rudolf Witzig (1916-2001) estuvo involucrado en algunos de los primeros combates contra los británicos en Túnez.

El 17 de noviembre el grupo de paracaidistas avanzó 18 kilómetros al Oeste cuando se enfrentaron al enemigo cerca de Djebel Abiod. Se dirigían a asegurar Tabarka cuando se encontraron con una fuerza británica que les empujó hacia el Este. Esta fuerza británica consistía en 3 Compañías del 6th Battalion del The Queen’s Own Royal West Kent Regiment, la Compañia B del Northamptonshire Regiment que disponía de vehículos blindados y algunas baterías de 25 libras (25-pounder “gun-howitzer”) del 138th Royal Artillery Regiment.

Fallschirmjäger registrado
en Djebel Abiod, Túnez,
con todo su armamento
personal.
El Batallón de paracaidistas del Mayor Witzig se trasladaba en camiones de 3 toneladas Opel Blitz 4×4) con el apoyo de carros de combate Panzer IV y otros vehículos. Los italianos también habían comenzado a moverse reforzados por dos batallones de la élite de San Marco de Infantería de Marina y dos batallones de la División  de Infantería de Montaña “Superga”. En total tenía 17 tanques y 400 paracaidistas con artillería autopropulsada.Los Fallschirmjäger se apresuraron a ocupar la población de Djebel Abiod para configurar controles de carretera y se dispusieron a detener el avance de la fuerza británica.

Los comandos de paracaidistas alemanes
en acción en Túnez.
La lucha comenzó con el intercambio de disparos de los vehículos blindados ligeros (Aufklaerung) seguidos de cerca por los Panzer IV de la Panzer Kompanie adjunta, alrededor de las 14.30 horas, mientras que la artillería enemiga y las ametralladoras Vickers peinaban la zona. La Flak-Batterie (20mm) abrió fuego contra el enemigo.

La tenaz defensa de su posición de los
paracaidistas alemanes en Djebel Abiod, 

frenó el avance enemigo durante 9 días 
y finalmente los ingleses tuvieron que
desviarse hacia el sudeste.
El objetivo que se había ordenado, Tabarka, a pocos kilómetros de la frontera con Argelia, no pudo ser tomado. El batallón de paracaidistas alemanes se atrincheró y defendió sus posiciones en la llamada “Cactus Woods” que al menos ofrecía alguna cobertura y ocultación. Era una colina elevada desde donde podían observar los movimientos de los británicos.

El miércoles, 18 de noviembre, los alemanes inician una ofensiva contra los británicos en Djebel Abiod y los franceses en Medjez-el-Bab. La descoordinación de las tropas Aliadas favorece la efectividad de los ataques alemanes.

Los paracaidistas alemanes se hicieron fuertes
en una colina de Djebel Abiod desde donde
podían observar los movimientos de
los británicos.
A pesar de destruir once vehículos, el avance inglés se detuvo, prolongando la lucha en Djebel Abiod nueve días más, debido a la falta de artillería aliada y a la valentía de los paracaidistas alemanes.

Su defensa fue tan feroz que la 78th Infantry Division finalmente se retiró hacia el Sudeste, al cruce de Medjez-el-Bab, en el río Medjerda.

Negociaciones con los franceses
Las fuerzas francesas de Vichy todavía controlaban la mayor parte de la defensa de Túnez, y los alemanes todavía no estaban seguros de qué manera podrían controlarla ellos. Como los franceses claramente superaban en número a las fuerzas del Eje, contaban con 9.000 hombres, se pensó en que la negociación y la diplomacia serían la mejor opción.

Heinz Knoche intentó
una primera negociación
con los franceses.
Durante la mañana del 16 de noviembre el Hauptmann Heinz Knoche (1913-2004) y el Oberleutnant Quednow, que hablaba con fluidez el francés, junto con el teniente Klein, comandante adjunto en funciones de la 14./Infanterie-Regiment 104, se dirigieron en una motocicleta con sidecar en misión de reconocimiento. Cuando se encontraron con las posiciones francesas fueron llevados ante el Comandante local del regimiento, el Coronel Le Couteux, que estaba en Tebourda.

Knoche recurriendo a una directiva del mariscal Pétain, preguntó el Comandante francés si evacuarían la zona a lo largo del río Medjerda y permitirían el establecimiento de tres cabezas de puente al otro lado, para poder rechazar el avance aliado, ya que habían entrado ilegalmente en Túnez. Knoche quería establecer las cabezas de puente en Djedeida, Tebourda y Medjez-el-Bad.

El coronel francés rechazó su solicitud. Se refirió a las órdenes recibidas por el alto mando francés en Beja y hablaría con los oficiales de Estado Mayor francés. Al final, se entrevistaron con el Comandante de la división Túnez, el General Barré, que accedió gracias a la diplomacia y a exagerar un poco, con regimientos ficticios alemanes en un mapa, estuvo dispuesto a renunciar a Tebourda y Djedeida y retirarse hasta Medjez-el-Bad, a la cual no iban a renunciar. Medjez-el-Bad, era un importante punto para el transporte a lo largo del río.

Mapa de las posiciones de los Aliados y las
de las fuerzas del Eje en Túnez en noviembre
de 1942. Clic para aumentar la imagen.
Los franceses cedieron las ciudades de Tebourba en el valle de Medjerda y Djedeida, negándose a entregar Medjez-el-Bab. Knoche, negoció la ampliación de la zona defensiva a las afueras de Medjez-el-Bab e incluir las tres cabezas de puente sobre el río Medjerda, en la misma Medjez-el-Bab, en Tebourba y en Djedeida.

El valor estratégico de Medjez-el-Bad se debía a su posición dominante sobre el rió Medjerda, a 50 Km. de Túnez. El rió Medjerda serpenteaba unos 200 Km. antes de desembocar en el golfo de Túnez entre Bizerta y la capital. El río era de poca profundidad con menos de 100 metros de ancho, con riberas de no más de 6 metros de altura y el lecho lleno de densos matorrales de helechos.

Vehículos blindados alemanes
transitan por una avenida de
Túnez, noviembre de 1942.
El puente de Medjez-el-Bab, era un puente en arco de ocho puntos construido en el siglo XVIII con las piedras del viaducto romano original que cruzaba el río Medjerda. Este puente era el mayor de los 9 puentes en total que cruzaban el río a intervalos de entre 10 y 15 Km. cada uno.

Los franceses continuaron utilizando tácticas dilatorias y no permitieron que los fallschirmjäger avanzaran aún más hacia el Oeste, frustrando así oportunidades para poder detener a los aliados antes de que tomaran posiciones clave. Fue una frágil tregua mantenida entre alemanes y franceses aguardando el esperado ataque aliado.

El día 19 de noviembre, la 10.Kompanie del III/FJR.5, al mando del Leutnant Werner Kempa tomaron el aeródromo de Gabes. Cuando los primeros vehículos de Estados Unidos aparecieron dos días más tarde fueron recibidos por fuego de artillería que conseguiría detenerlos.

Semiorugas alemanes descargados de  un
Me 323 en un aeropuerto de Túnez,
en noviembre de 1942.
Ese mismo día 19, el comandante alemán, Walther Nehring, solicitó a los franceses el tránsito de sus unidades a través de la línea defensiva que estos habían establecido en Medjez, a lo que el General Barré se resistió. Los alemanes los atacaron el 19 de noviembre con el III Batallón de Knoche, precedido con el ataque de bombarderos en picado Junkers Ju 87 “Stuka” (Sturzkampfflugzeug) contra las divisiones francesas. Los alemanes fueron rechazados, tuvieron 22 muertos, aunque las bajas de las tropas francesas fueron tan elevadas que les obligaron a retirarse. Los fallschirmjägers capturaron un nido de ametralladora francés e hicieron varios prisioneros.

El comandante alemán
Walther Nehring
(1892-1983).
 
Tan pronto se marcharon los franceses, que se vieron obligados a abandonar importantes suministros, armas y combustible que habían almacenado en la ciudad. Los paracaidistas, crearon posiciones defensivas para asegurar Medjez-el-Bad “llave de Tunez” que ahora estaba en manos alemanas.

Debido a esto, para el 22 de noviembre las unidades francesas que seguían combatiendo se unieron definitivamente a los aliados, al tiempo que los alemanes reforzaban su posición en Túnez.

Por otro lado, en Libia, el Afrika Korps al mando de Rommel el 23 de noviembre, alcanza en su retirada El Agheila, punto desde el que inició su ofensiva en enero de 1942.

El Eje logra establecerse en Túnez
La Luftwaffe, disfrutando de la superioridad aérea local que poseía (en tanto que los aviones aliados tenían que volar desde sus distantes aeródromos de Argelia), acosó a las columnas aliadas por todo el camino.La columna británica en Djebel Abiod recibió algunos refuerzos pero vio detenido su avance durante 9 días.
Soldados alemanes fotografiados en un
camino de Túnez en noviembre de 1942.

El 22 de noviembre de 1942, tanques de la 50° Brigada italiana forzaron a los paracaidistas norteamericanos a abandonar Gafsa.

Entonces las distintas columnas aliadas se concentraron para un gran asalto el 24 de noviembre aunque finalmente este no tuvo lugar debido a las lluvias torrenciales que cayeron en la zona y detuvieron todos los movimientos.

Para el martes 26 de noviembre, los aliados decidieron avanzar aprovechando una retirada alemana, cubierta con la voladura del puente de Medjez-el-Bab en la madrugada de ese día, una sección de 12 metros del puente yacía en el río Medjerda, tras activar una carga explosiva.

El puente de Medjez-el Bad, sobre el río
Medjerda. Es un puente Bailey
construido por los aliados.
El puente destruido de Medjez-el-Bab fue reemplazado con un puente Bailey de 100 pies a través del rio Medjerda. Estuvo a cargo de la 237 Field Company (Royal Engineers) de la 78th Infantry Division. Su construcción retrasó el avance de las unidades aliadas hasta que estuvo terminado.

Las unidades aliadas entraron en Medjez sin oposición y al atardecer de aquel ya habían tomado posiciones en Terbourba (que también había sido evacuada estratégicamente por los alemanes), preparando sus avances hasta Djedeida. Sin embargo al día siguiente los alemanes atacaron las líneas aliadas, echando a perder esta nueva oportunidad.

Aeródromo de la Luftwaffe en algún lugar
del norte de África durante la Segunda
Guerra Mundial.
Entre el 22 y el 30 de noviembre de 1942 la Luftwaffe realizó 1.084 salidas y perdió 63 aparatos, incluyendo 21 aviones en tierra. La fuerza aérea italiana, la Regia Aeronautica, registró solo la pérdida de 4 aparatos. Por el otro bando, entre el 22 y el 30 de noviembre de 1942 la Royal Air Force (RAF) realizó 1.710 vuelos y perdió al menos 45 aparatos. La Fuerza Aérea del Ejército de los Estados Unidos (USAAF) realizó 180 vuelos y perdió al menos 7 aparatos.

Patrullas de fallschirmjägers se enviaron a distintas localidades para localizar posiciones de los Aliados. El 30 de noviembre una patrulla se encontró con el 2nd British Parachute Battalion (1st Parachute Brigade) que se habían aproximado para tomar el control del aeródromo de Pont du Fah. Hubo intercambio de disparos que solo era para ganar tiempo, ya que el General Nehring planificaba la gran ofensiva.

Paracaidistas y tanquistas listos para entrar
en combate contra el enemigo en Túnez.
Más tropas del Eje habían llegado, incluyendo los modernos tanques del Schwere Panzer Abteilung 501. Esta era una de las 2 unidades que habían sido prometidas a Rommel. El Schwere Panzer Abteilung 501 había sido constituido con 20 tanques Panzerkampfwagen VI Ausführung H (Tiger de 88mm), dos en septiembre, ocho en octubre y diez en noviembre y 25 Panzerkampfwagen III Ausf. N (PzKpfw III, de 75mm).   El 23 de noviembre los primeros tres Tigers de la 1° Compañía desembarcaron en Bizerta. Además la Luftwaffe había ganado la superioridad aérea temporal.

El plan de Nehring era rodear el área de Tebourda, sorprendiendo con los fallschirmjäger a través de El Bathan para cerrar el círculo. La mayor parte de las fuerzas del Eje en el Norte se defendían de los ataques con sólo unos pocos hombres que guardaban los accesos occidentales a Túnez.

El Eje lanzó un contraataque el 1 de diciembre, y los británicos al general inglés Kenneth Anderson tuvieron que replegarse con más de mil bajas británicas y la pérdida de 70 tanques.

Viewing all articles
Browse latest Browse all 1457

Trending Articles