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HALLAN EN UNA CUEVA FRANCESA EXTRAÑAS ESTRUCTURAS DISPUESTAS EN SEMICÍRCULO

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En la profundidad, a 330 metros de la entrada de una cueva francesa, encontraron 400 estalagmitas grandes, rotas, dispuestas en semicírculos de hasta 6,7 ​​metros de largo. Son construcciones de hace más de 176.000 años.

Interior del recinto situado a 330
metros de la entrada de la cueva.
Los científicos han descubierto que las estructuras que se encontraron en la cueva Bruniquel (suroeste de Francia) en la década de los 90' fueron construidas por los neandertales, informa la revista Nature el miércoles 25 de mayo. Este hallazgo demuestra que nuestros ancestros eran capaces de crear construcciones complejas mientras se iluminaban con la luz del fuego.

Las seis estructuras circulares, compuestas por 400 estalagmitas rotas, fueron levantadas por los neandertales para formar muros rudimentarios en una cueva que se encuentra a alrededor de 330 metros de profundidad y tienen algunas zonas quemadas, lo que sugiere que nuestros antepasados empleaban las llamas para poder ver. Tras analizar la calcita que ha crecido sobre las estalagmitas, los científicos han deducido que las edificaciones pudieron ser levantadas hace entre 174.400 y 176.600 años.

En la cueva de Bruniquel los semicírculos
están compuestos de alrededor de 400
estalagmitas rotas.
Hasta el momento, los especialistas no han encontrado restos, herramientas de piedra u otras señas que indiquen la presencia humana en la cueva. Sin embargo, consideran que las piezas fueron construidas por los neandertales, ya que hasta donde conoce la “Ciencia oficial”, ningún otro homínido habitaba esa parte de Europa occidental en aquel periodo de la historia.

Las 400 estalagmitas son grandes, están rotas, dispuestas ordenadamente en semicírculos de hasta 6,7 metros de largo con varias capas de fragmentos de estalagmitas, con una altura de 30 centímetros, en la profundidad de las cuevas de Bruniquel, en el suroeste de Francia, esto hizo pensar a un grupo de espeleólogos y científicos, que se trata de una construcción bien pensada de los Neandertales; la primera arquitectura descubierta del hombre del pasado, que se conoce habitó en Europa desde hace cientos de miles de años.

Infografía sobre este descubrimiento
paleontológico. Clic para ampliarla.
Las pruebas realizadas en las partes rotas de las estalagmitas y calcitas indican que las paredes fueron construidas hace alrededor de 176.000 años.

“Cuando lo ves, es obvio que no es natural”, dijo al equipo de Nature, el 25 de mayo, Dominique Genty, geocientífica del Instituto Pierre-Simon Laplace en Gif-sur-Yvette.

En el lugar no se encontraron restos humanos, ni tampoco señales de osos invernando en su interior que pudieran haber intervenido. Las misteriosas estructuras han atraído a numerosos expertos científicos y a medida que los estudios avanzan el interés podría ir en aumento.

Si bien por ahora no se han emitido conclusiones, los investigadores proponen que las paredes son actualmente una evidencia de que seres humanos del pasado, posiblemente Neandertal, que construyeron estas estructuras aventurándose profundamente en el interior de las cuevas, pero no saben por qué. Pudieron ser hogares, o construcciones para eventos religiosos o rituales. No hay pruebas para determinarlo.

En la caverna también hallaron
estalagmitas y huesos quemados.
La historia del hallazgo comenzó en 1990 cuando un grupo de espeleólogos descubrieron las seis curiosas estructuras situadas en el interior, a exactamente 336 metros de la entrada de la cueva. Para llegar hay que cruzar un estrecho paso que en algunos momentos requiere arrastrarse a cuatro patas.

Más tarde, según un primer estudio de 1995, liderado por el francés François Rouzaud (1948-1999), encontraron en una cueva cercana, restos de fuego y huesos quemados de un herbívoro de los cuales no pudieron detectar ningún carbono radiactivo. La no existencia de carbono radiactivo, se cree que es una señal de que el hueso era mayor de 47.600 años, tiempo límite de la datación por carbono.

Tras analizar la calcita que se ha depositado
sobre las estructuras, los espeleólogos no
dudan en afirmar que fueron construidas
por seres humanos hace 176 mil años.
En 1999, el trabajo se detuvo debido a la muerte del arqueólogo líder en la excavación, el francés Rouzaud. Los espeleólogos volvieron a la carga en 2013, mediante un grupo dirigido por Sophie Verheyden, investigadora paleoclimática del Real Instituto de Ciencias Naturales de Bélgica, la espeleóloga Dominique Genty y el arqueólogo Jacques Jaubert, de la Universidad de Burdeos, según informa la revista Nature.

Las estalagmitas fueron arrancadas y trasladadas para ser dispuestas según un orden misterioso. "Desplazaron 2,3 toneladas de material. Eso sólo puede ser un trabajo colectivo", destacó Jaubert.

El lugar es muy probable que se hubiera
utilizado para algún ritual religioso
hace 176 mil años.
"Estimamos haber aportado la prueba de la capacidad del hombre de Neandertal de adentrarse bajo tierra, en un medio hostil, con la ayuda del fuego, para hacer cosas inhabituales, no solo para subsistir", dijo.

Jean-Jacques Hublin, paleontólogo del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Leipzig, Alemania, no participó en el estudio, pero publicó también con fecha 25 de mayo algunas características que describen a los Neandertales.

Exterior de la caverna de Bruniquel,
en el suroeste de Francia.
Explica que su cuerpo era más ancho y grueso con huesos robustos desde el nacimiento. Tenían una pelvis más ancha y las extremidades más cortas. Hublin postula que el Hombre moderno y los Neandertales se separaron genéticamente hace unos 600.000 años. Según esta afirmación, existían simultáneamente al menos dos líneas evolutivas hace 175.000 años, cuando se construyeron las paredes de estalagmita.

Los Neandertales, prosperaron en una gran franja de Europa y Asia entre aproximadamente 350.000 y 40.000 años atrás. No hay ninguna evidencia que los Neandertales hayan sido inferiores cognitivamente al Hombre Moderno, como intentan hacernos creer.

Los seis semicírculos hallados en la cueva
de Bruniquel tienen 6,7 metros de largo y
una altura de 30 centímetros.
La cueva de Bruniquel se halla en la región de Aveyron, y se encuentra en un estado de conservación excepcional. Descubierta en 1990, de muy difícil acceso, cuenta con unas sorprendentes estructuras hechas a bases de estalagmitas, enteras o en pedazos, ordenadas de un modo misterioso.

Las estructuras no pudieron ser creadas por condiciones naturales, ni por animales, insisten los investigadores. Es más, la forma en que como están dispuestas esas extrañas construcciones de piedra podrían apuntar a algún tipo de ritual.

El valle de Aveyron, donde se encuentra
la caverna de Bruniquel.
El hombre de Neandertal, que debe su nombre al valle alemán en que se encontraron los primeros restos, en 1856, vivió durante el Paleolítico medio en gran parte de Europa y parte de Asia. Era cazador, pero la imagen deliberadamente distorsionada de que el hombre de Neandertal era un humano bruto y depredador se derrumba día a día con nuevos descubrimientos que cambian toda la “Historia oficial” sobre los humanos que nos precedieron.

Vea el video de la cueva aquí:




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