Los países más afectados fueron Brasil (50 asesinatos), Filipinas (33) y Colombia (26) y Perú y Nicaragua (12 cada uno) el 66% de las víctimas son latinoamericanas, según un informe de la ONG Global Witness.
Tala ilegal de árboles en Ucayali, Perú. |
La sobreexplotación minera y de otros recursos naturales (madera, aceite de palma, ganadería, soja), promovida muchas veces por empresas apoyadas por la seguridad privada o las fuerzas estatales, dispararon el 2015 el asesinato de personas que se oponían a estos proyectos. Un total de 185 asesinatos en 16 países han sido documentados por la organización Global Witness, lo que supone un aumento del 59% respecto al 2014. Los países más afectados fueron Brasil (50 asesinatos), Filipinas (33) y Colombia (26) y Perú y Nicaragua (12). Cerca del 40% de los asesinados son indígenas.
Protesta por el asesinato de ecologistas en Mindanao, Filipinas en 2015. |
Ecologistas anónimos cada año dan su vida por proteger el planeta, cada vez es más común que las comunidades locales que se oponen a los proyectos de sobreexplotación “se encuentren en el punto de mira de la seguridad privada de las empresas, las fuerzas estatales y un mercado floreciente de asesinos a sueldo”, señala con crudeza Billy Kyte, encargado de campañas de Global Witness, que pide que los gobiernos que intervengan urgentemente para detener esta espiral de violencia. Muchos asesinatos ocurrieron en aldeas remotas o en el corazón de las selvas tropicales, con lo que es probable que el número de víctimas mortales sea mayor.
Foto de un sector donde hace unos meses existió selva amazónica brasileña, arrasada sin piedad. |
“Muchas autoridades o bien cierran los ojos o bien impiden activamente la investigación de estos asesinatos por la connivencia que existe entre intereses corporativos y estatales, los principales sospechosos de los asesinatos”, dice el informe en el que se denuncia una cultura de impunidad arraigada en algunos países.
El 28 setiembre 2015 en los enfrentamientos por Las Bambas, en Apurimac, Perú, murieron manifestantes y 15 fueron heridos por disparos de la policía. |
Protesta ecologista indígena en Nicaragua en 2016. |
Maria da Conceição Chaves Lima y su esposo asesinado Raimundo dos Santos Rodrigues. |
Son estremecedores los testimonios documentan las ejecuciones que ha sufrido el pueblo Lumad (Mindanao, Filipinas), a manos de grupos paramilitares, por oponerse a una invasión de sus tierras sin su consentimiento destinada a explotar carbón, níquel y oro.
Asesinatos de ecologistas por país 2010-2015. Clic en el mapa para aumentarlo. |
Armando Funez, María Enriqueta Matute y Ricardo Soto, tres ambientalistas indígenas asesinados en Tolupán, Honduras, el país con más ecologistas asesinados en proporción de habitantes. |
Entre 2010 y 2015, Global Witness ha registrado 753 asesinatos. Tres de cada cuatro se perpetraron en América Latina (77%), con Brasil (207), Honduras (109) y Colombia (105) a la cabeza en el número de muertos. Solo estos tres países acaparan más de la mitad de los crímenes en ese periodo (56%). Honduras, con un poco más de seis millones de ciudadanos, ha vuelto a ser en 2015 —por sexta vez consecutiva— el lugar con más muertes de ecologistas por cada 100.000 habitantes.
Berta Cáceres, la ecologista asesinada por oponerse con éxito a la construcción de una represa en Honduras. |
Por su asesinato están detenidas cinco personas, entre ellas un mayor del Ejército llamado Mariano Díaz Chávez, que recibió entrenamiento especializado, estuvo de servicio en Irak y realizó maniobras conjuntas con Estados Unidos. Una de las personas implicadas en la muerte de Cáceres, cuya identidad no ha sido revelada, ha confesado que participó en el crimen y recibió 500.000 lempiras (22.000 dólares) para planificarlo.