Efectivos de la Prefectura Naval Argentina (PNA) lograron secuestrar 30 meteoritos argentinos cuya composición mayor es de hierro que se encontraban ocultos en una lujosa finca de la localidad santiagueña de Quimilí para ser vendidos en países europeos, informaron fuentes judiciales.
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| Algunos de los meteoritos secuestrados en Quimilí, Santiago del Estero. |
El procedimiento se realizó el martes 24 de noviembre por la tarde en una casa del barrio Belgrano de la población ruralde Quimilí, ubicada a 200 kilómetros al noroeste de la capital santiagueña, cercano al punto limítrofe con la provincia del Chaco. Al terminar de extraer los objetos celestes con maquinaria especial y pesarlos, se alcanzó los 4.000 kilogramos, se informó hoy, corrigiendo así la primera información que hablaba de 2,5 toneladas.
Las mismas fuentes indicaron que 30 meteoritos de distintos tamaños se encontraban envueltos en plásticos y enterrados en la finca propiedad de Vilma Torres, una comerciante de 52 años que se dedica a la venta de muebles de hogar en Quimilí y una céntrica sucursal en la capital provincial, además de tareas agrícolas y ganaderas.
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| Uno de los meteoritos ferrosos ocultados en Quimilí para ser vendido en Europa. |
Varios de los meteoritos fueron ocultados en el fondo del inmueble y debajo de pisos cerámicos en los que se realizaron varias excavaciones. De acuerdo a las primeras investigaciones, los cuerpos celestes pertenecen a las provincias de Santiago del Estero y Chaco y se sospecha que iban a ser vendidos en países de Europa. En el lugar y por orden del juez federal de Santiago del Estero, Guillermo Molinari, seguían trabajando anoche efectivos de la PNA.
La labor demandó un día de trabajo, luego de lo cual se realizó un operativo especial para trasladar los meteoritos hacia la base de la Prefectura en Las Termas de Río Hondo.
Según se pudo saber los meteoritos iban a ser vendidos en el mercado negro de Europa donde pagan más de 2.200 dólares el gramo.
Aquí la difusión de la noticia:
Quimilí: hallan más de 28 meteoritos que estaban enterrados en una finca